Hay un dicho que dice así: “Dale limosna, mujer, que no hay en la vida nada, como la pena de ser, ciego en Granada” y cuanta razón guarda nuestro refranero popular.
El pasado 14 de diciembre los alumnos de 1º de Bachillerato realizaron una excursión con sus profesoras Margarita Sousa Coder y Gema Cid Masero a la ciudad de Granada.
Durante tres días los alumnos se recrearon no sólo del conjunto histórico cultural de la ciudad, sino también de su ambiente, gastronomía y del encanto que guarda cada rincón.
La primera parada fue en la visita obligada de la Alhambra. Allí, pudieron disfrutar de los palacios Nazaríes, de su preciosa alcazaba y de cada rincón pensado para distraer a los sentidos. Al bajar de la Alhambra nos situamos en el centro de la ciudad, que además se encontraba decorada con las luces navideñas y que hacía de su catedral y del entorno un lugar aún más especial.
El segundo día lo destinamos al Parque de las Ciencias. Allí las horas se nos pasaron volando entre tantas curiosidades, exposiciones muy variadas, como la de las emociones, y el planetario; conocer el cielo de Granada fue realmente una experiencia espectacular. No podía faltar la visita al mirador de San Nicolás, ni pasear por las calles del Albaicín, descubriendo sus encantos, los maravillosos cármenes y el tradicional paseo de los Tristes. Allí nos inmiscuimos en el museo de los aromas, donde el olfato se recreó con esencias árabes y la creación y conservación de los primeros perfumes. Para concluir, el último día paseamos por el parque de Federico García Lorca. Pudimos visitar su casa y recitar allí algunos de sus versos más insignes en una templada mañana. No podía faltar la parada en el centro comercial más grande de España, el Nevada. Tras una parada para recobrar fuerzas, dispusimos nuestro viaje de retorno, manteniendo en la retina el atardecer de una de las ciudades más hermosas de nuestro país.
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